Especulación Futurista 2005

Esta vez no quedé primero, sino segundo. Me ganó Aiween. :P
He de decir en mi descargo, que el relato fue escrito con pocas ganas y mucho cansancio. Así que no es muy bueno. En fin, aquí va.

Nota: cuando tenga más tiempo, volveré a postear.

Capítulo 1: Ursidae

- A veces, la fragilidad de todo lo que nos rodea me repugna. Hasta el extremo.

Pero eso me demuestra que no ser feliz es solo culpa mía, porque con todo lo demás no tengo que contar...

-Vamos... No me llores más. Por mucho que tapes la cámara, esto sigue siendo un videófono: te oigo perfectamente.

- ¡Y qué se supone que debo hacer! ¿Mirar hacia delante! ¿No pararme! Yo tengo mis sentimientos, ¿sabes! Y estoy ¡HARTO! ¡Lo dejo! ¡Abandono!

-No estás siendo muy racional. Y lo sabes. Creo que deberías tranquilizarte, y ...

-¿PENSAR Con la cabeza fría! ¿Es eso! ¿Es ese el misterio! Venga, venga. Venga... Por favor. ¡ODIO mi trabajo! ¿Lo entiendes! ¡LO O-D-I-O! En mi contrato se especifica que me pagan por siete horas al día, eso son treinta y cinco horas semanales. Los sábados y los domingos descanso. Pero eso es papel mojado. Entro a las ocho de la mañana, y salgo, cuando pronto a las siete de la tarde. Y más de un sábado me toca pringar. Eso son un mínimo de once horas diarias, cuatro más de las que me pagan. Mas los sábados perdidos y los festivos más bien nefastos. Me explotan como a un esclavo. Hace unos años decían que eran los chinos y los taiwaneses; los niños filipinos los que hacían zapatillas para el mundo rico. Pero eso debía ser un cuento para cerrarnos los ojos. Porque cada vez más, este mundo, supuestamente desarrollado en el que sobrevivimos, comienza a parecerse a los países subdesarrollados. Yo dimito, con carácter definitivo e irrevocable.

-Vamos a ver. No corras tanto, y no seas tan bruto. Para empezar, los niños asiáticos se merecen un mínimo de dignidad que ya les niegan las multinacionales que los explotan, que les negamos nostros cuando compramos artículos Made in Taiwan... Independientemente de eso, ¿has pensado en hablar con tu enlace sindical?

-Pero tú en qué mundo vives. Ingenuo... El departamento legal de mi empresa es casi tan grande como el resto de los departamentos... ¡juntos! Ni enlace sindical, ni sitio donde agarrarse. Ahí no se atreven a meter las narices ni los de hacienda. No señor. Al último inspector que vino se lo merendaron los abogados. Se cogió la baja por depresión y todo...
-Venga hombre, que ya sabes que los funcionarios...

-¡A mi no me toques la moral! ¡Primero me vienes con tus cuestiones éticas sobre la dignidad humana, y ahora te metes con los funcionarios? Te recuerdo que mi padre...
-Vale... Vale... Perdona, hombre... A ver. Qué me contabas del inspector ese...
- Pues eso. Nada. Que cuentan las leyendas urbanas que se cogió una baja por depresión. Fueron a por él: por todos lados. Y le dieron bien. O eso se cuenta. En fin, a lo que iba: que me quiero marchar de mi trabajo. Estoy todo el día encabronado. ¿Sabes por qué me dejó Elisa? Porque no le hacía caso. Según ella. ¿Y sabes qué? Que creo que tiene razón: que mi trabajo primero me absorbía y luego, me agotó hasta tal punto, que acabé ignorándola por completo. Es más: definitivamente, tiene razón. El otro día me puse sus gafas un momento y... ¿sabes? Cuando miras las cosas desde su punto de vista, tiene razón...
-A ver, Gabriel. No me empieces con tus chistes malos. Sé perfectamente que Elisa tiene una visión casi perfecta. Te recuerdo que yo os acompañé a la clínica a que le calibrasen la córnea con láser, o la gaita esa. Tú eres el que sabe de informática. En todo caso, es un chiste bastante patético. Elisa te dejó porque encontró a otra persona. Y sé que te cuesta admitir que esa persona se llame Laura en vez de Antonio.
-A ver ... No me vuelvas a tocar la moral otra vez. Que yo me meta conmigo mismo es una cosa, pero eso no te da derecho a meterte a ti también.
-Mi derecho es adquirido, Gab. Soy tu amigo, ¿recuerdas...?
- ¿Otra vez rollo moral? Venga hombre, sé un poco más serio.
- Lo estoy siendo. O al menos lo finjo... bastante bien... Ja ja ja. Venga, ahora en serio. Olvídala. Olvídate de todo. Deja tu trabajo si quieres, pero si lo dejas, que no sea para hundirte, sino para encontrarte contigo mismo. ¿Entiendes? Tienes que reunirte con tu yo interior y discutir quién eres y qué quieres...
-Tú y tus teorías sofrológicas... La madre que te...
-Y tú y tus chorradas cuánticas. ¿Por qué no pides trabajo en la nueva Fundación para el Software Libre? Seguro que allí tienes mejor rollito.
-¿Y trabajo ars et amore y me alimento del aire? Venga, Luis, no me ... no me...
-A ver. En la fundación desarrollan Software Libre, que no gratuito. Y pagan a los programadores. Un salario justo...
-Si claro. Como Intermon-Oxfam. Y luego el contable se fuga con la pasta y deja a todos con el culo al aire... Comercio justo... justo me iba ahora, con la pasta a comerciar a otra parte.
- Eso fue hace dos años. Y no es lo mismo...
- Fue hace tres. Estamos en 2026, ¿recuerdas? ¿Cerebrín?
- Oye, Gab. No te metas conmigo, ¿vale? Te recuerdo que el ingeniero está al otro lado, y que el que está aquí es amigo del ingeniero. Es decir, amigo tuyo. Ese que te conoce como eres, y aún así te quiere. Así que no me metas el dedo en el c... ojo. Aquí el que le toca la moral al otro soy yo. Y tú eres el pobre capullo que quiere dejar su trabajo y no sabe a donde ir. Y yo tu guía espiritual...
-¡Eh! Hemos dicho que sofrología la justa. Déjate de compadecerme y de tanta espiritualidad. Corcho. Y sí: quiero dejar mi trabajo. ¿Cuántas veces he de decir que estoy harto? Mira:

while(1) {

printf(“Estoy harto\n”);
}

- ¡Ten cuidado! ¡Ese algoritmo podría estar patentado. Igual tienes a un currito de la SGAE esperándote en la puerta para cobrarte...!
- Vamos a ver, Luis. ¿Qué es eso de “currito”? No hemos quedado en que no íbas a atentar contra la dignidad de...
- ¡Gab! Ya basta. Tú haces lo mismo. Eres tan racional y tan frío cuando quieres como yo cuando me lo propongo.Y tan... no sé: ¿tocapelotas? cuando te interesa. Sabes que lo hago bromeando, ánimus iocandi que se dice.
-Luis, en serio: casarte con esa avogadra ... no te sentó bien.
- Oye... no hablemos de matrimonios deslabazados, ¿vale? Sabes que Suze es mi vida. Entiendo que sientas envidia de nuestra relación, pero...
- ¿Envidia! ¿De ti! Vamos hombre...
- A ver. ¡Chorizo(1) con patas! ¡hombre de pocos pics! si vamos a empezar con los insultos, mejor conectamos los guantes de boxeo al videófono y nos liamos a tortas. Y si quieres firmamos un contrato en el que juremos no volver a hablarnos y a putearnos mutuamente el resto de nuestras vidas. ¿Te parece?
1:Chorizo: persona que imita a los productos cárnicos, pasándose todo el día sin hacer nada, tomando el sol. Como los chorizos que se cuelgan del techo. N. del A.)
- Vaaaale. Perdón. Lo siento, sabes que estoy muy alterado. Estoy...
-Sí. Harto.
- Eso. Además, tú tienes a Susana de tu parte. Me destrozaría en los tribunales...
- ¡Gab!
- Me callo. Me callo.
- En fin, volviendo a lo que te comentaba antes. Creo que deberías dejar tu trabajo AYER. Y reorganizar tu vida. En la Fundación Para el Software Libre podrían darte trabajo. Tú eres bueno, tío. No tanto como yo...
- No, tanto no. Más. Ja ja ja. Y lo sabes. ¿Te han comido la cabeza en una secta?
- Venga colega, en serio: no seas tonto. Yo tengo un par de amigos trabajando dentro. No cobran tanto como los publicistas de Hasefroch, pero les pagan. Y hacen un servicio a la comunidad. Y la comunidad se lo devuelve con creces. Seguro que allí encuentras el buen rollo que te falta...
- Joder, macho. Ahora lo tengo claro: tú me estás hablando de una Secta. Bienvenido a Software Libre Foundation, por favor: programa hasta el atardecer, por un mundo mejor.Nuestro líder tiene todas las respuestas...
- No seas capullo. Sabes que no es así. ¿Por qué no lo intentas al menos?
- No sé... estoy muy perdido ahora mismo. Muy desorientado. Lo consideraré, al menos. Peor que en Ursidae no puede ser. Pero no sé: el Soft Libre me dejó muy desencantado en su día.
- La culpa fue de las patentes de Software. Y lo sabes.
- Vale... sí. Bien. De acuerdo. Tienes razón. Venga va. Lo pensaré. Pero es que regalar mi trabajo...
- Te recuerdo que en la empresa para la que trabajas se QUEDAN con tu trabajo, por un salario paupérrimo...
- ¿Sabías que la palabra salario viene de sal? A los legionarios romanos les pagaban con sal, pues ésta era tan escasa y apreciada que se usaba como moneda de cambio...
- Gab...
- ¿Sí?
- No me cambies de tema.
- Perdón.
- A lo que iba: tu trabajo en Ursidae pertenece a tu empresa. Al menos en la FSL pasará a ser de todos.
- Eso incluye a Elisa...
- ¡Olvídate de ella!
- Perdón... Venga, va. ¿Otra vez he dicho venga va? Elisa lo odiaba ... ¡Vale! No he dicho nada. (...) Les voy a mandar un videomail a Ursidae para decirles que... Mejor no les digo nada. Pero te advierto que como la FSL luego no me dé trabajo, te corto lo que no vuelve a crecer...
- Oye, perdona. Te tengo que dejar. Me llama Suze. Algo pasa con el escáner de retina de la entrada. No le deja entrar...
- Tú y tus galletazos tecnológicos...
- Me tengo que ir. Lo siento...
- Nos vemos mañana. Un abrazo.
- Igualmente.

Capítulo 2 : Ricardo Mateo

“En el hall de la entrada, había una foto enorme. Un hombre con una barba enorme y cara de no haber roto un plato. Debajo: una leyenda. RMS. Pocos sabían que eran las iniciales de Richard Matthew Stallman. El hombre que en 1984 fundó el movimiento GNU.”

- Gaizka... Eso suena harto cutre.
- Bueno, pues dime como mejorarlo.
- No lo sé. Parece que estés contando la historia del nacimiento de una religión en un planeta lejano. Vamos a ver: es la FSF. Todo el mundo la conoce. Que no todos sepan quien es Stallman, pues vale. Pero lo de “cara de no haber roto un plato”... por favor.
- Vale... empezaré de nuevo. No sé, a ver si se me ocurre algo mejor. Puñeteros trabajos. Estos profesores de ética ¿qué se han pensado? ¿Que no tengo nada mejor que hacer?
- Sólo intentan que te informes. A ver si de una vez empiezas a pensar por ti mismo. A eso, y a tener tu propio criterio. Que ya es hora. Su función es servir de guía...
- Domadores de circo... más bien.
- No te pases... Te recuerdo que tu hermana es profesora.
- Sí, pero de matemáticas.
- También enseña a razonar, ¿no? Si p -> q, ¬q -> ¬p
- (...) Touché. En fin, da igual, si al menos no hubieran cerrado El Rincón del Vago por culpa de las mierda leyes anti-cultura...
- Bueno. Se siente. Es lo que tiene dejar el control en manos de unos pocos.
- Oye. A mi no me mires... Que parece que con ese tonillo tuyo del “pocos” me estés acusando a mi. La culpa fue de los políticos que se dejaron mangonear...
- Y tuya también, por no protestar a tiempo.
- Claroooooo... clarooooo. A ver si el calentamiento global va a ser culpa mía también, y el hunimiento de Holanda. Te recuerdo que eso fue en 2010 ¿O fue después de las inundaciones de 2012? En fin, yo tenía entonces unos 7 u 8 años.
- Y ahora tienes el mismo criterio que entonces...
- ¿Quiéres discutirlo con mi profesora de ética?
- Je je je. Te recuerdo que aprobaste justillo el primer semestre.
- Eso es un golpe bajo.
- No hables tanto y trabaja. Que mañana tienes entrega...
- Eso es otro golpe bajo.
- ¡Estudia! ¡Demontre!
- ¡Ahhhh! ¡Esa palabra está registrada! ¡Tienes que pagar el canon!
- Lo que te digo: mismas frases, misma mentalidad, mismo criterio que cuando tenías 10 años. ¡Estudia y aprende algo, hombre! Venga a ver...

Capítulo 3 : Adiós AntiCultura

Política.

'Caso FSF'

El Tribunal Supremo desestima el recurso de la multinacional Hasefroch contra el gobierno.

Considera que las subvenciones a la FSF son legítimas y le recuerda que 'su época de poder finalizó, y que debe atenerse a las nuevas reglas de la justa competencia'

EFE / Madrid

En una resolución sin precedentes, el Tribunal Supremo dictaminó ayer por nueve votos a favor, y una sola abstención de sus componentes, que las subvenciones realizadas por el gobierno a la FSF “no pueden considerarse ilegales ni ilegítimas de ninguna forma” y que por tanto “no deberán ser devueltas”. Además, aclara que “aunque las subvenciones se concedieran con anterioridad a la reforma de la ley de la Propiedad Intelectual, y pudieron en su día constituir un acto delictivo, bajo las nuevas circustancias, no procede”. Así pues, concluye: “El artículo 1 la ley del 12/11 -Propiedad sobre el Conocimiento Tecnológico y la Cultura- de 2024, invalida retroactivamente el carácter delictivo de cualquier actividad, en las áreas de propiedad tratadas, que hubieran podido resultar consecuencia de la revocada Ley de La Propiedad Intelectual de 21/7 de 2012” Con esta resolución, el Tribunal da capetazo y cierre a la última de las causas pendientes, surgidas a partir de las popularmente conocidas como “Leyes Anticultura”.

Diario El Correo. Edición Digital.

13 de Octubre de 2025

Capítulo 4 : (float)Sueños

“Las revueltas de La Colette provocaron que finalmente, el Parlamento Europeo permitiese a los estados miembros rechazar la Ley Europea de Patentes y Propiedad Intelectual. España fue el primer estado europeo en deshecharla y abrazar el movimiento de Cultura y Software abiertos (mucho antes con actos -por el caso las Subvenciones Libres-, que con leyes). Alemania y Reino Unido se sumaron poco después. A día hoy, el único estado miembro que irónicamente no rechaza abiertamente la vieja ley europea, es Francia. El recién elegido presidente Francés Gabrielle Deschain, ha declarado que muy pronto la situación cambiará. Y aunque muchos países, entre ellos los Estados Unidos de América, aún se resisten, la Historia ha venido demostrando que determinadas propiedades como la intelectual, solo pueden tener un propietario legítimo: la humanidad”.

Jorge Caudal Templario. Profesor de Derecho en la Universidad de Deusto.

De una entrevista publicada en :

Diario digital La Verdad

16 de Enero de 2032